¿Cómo saber si mi cadena es de oro real?

En este artículo podrás ver las formas caseras para descubrir si tu cadena de oro es real o no.
¿cómo saber si mi cadena es de oro real?

Una pieza de joyería es un objeto de gran importancia y hasta valor económico, y como tal, es fundamental asegurar su autenticidad.

Si tenés dudas sobre si tu cadena es realmente de oro o chapada, existen algunos métodos caseros que podés probar antes de recurrir a un profesional.

Es importante recordar que estas pruebas preliminares no son infalibles y la evaluación de un experto siempre será la más certera.

5 métodos caseros para ver si tu cadena es de oro

Acá te mostramos algunas técnicas sencillas que podés aplicar en casa para tener una idea inicial sobre si tu cadena es de oro o no.

Inspección de marcas y sellos

Una de las primeras cosas que tenés que buscar en tu cadena son pequeñas inscripciones o grabados, conocidos como marca o sello. Estas marcas suelen indicar la pureza del oro, expresada en quilates (K) o mediante un número de tres dígitos que representa las milésimas de oro puro (por ejemplo, 750 equivale a 18K, 585 a 14K).

Por otra parte, la presencia de un sello oficial puede ser un buen indicio de autenticidad, aunque su ausencia no siempre significa que la pieza sea falsa (especialmente en joyas antiguas o de ciertos orígenes) y lamentablemente, las marcas también pueden ser falsificadas. Busca números como 10K, 14K, 18K, 22K, 24K, 375, 417, 585, 750, 916 o 999.

Prueba del limón

Algunas personas sugieren usar un limón para comprobar la autenticidad del oro. La idea es aplicar unas gotas de jugo de limón sobre una parte pequeña de la cadena y observar si hay alguna reacción o cambio de color. En teoría, el oro puro no debería reaccionar al ácido cítrico del limón. 

Sin embargo, esta prueba es confiable para el oro ya que muchos metales base resistentes a la corrosión tampoco reaccionarán y aleaciones de oro de menor quilataje podrían mostrar alguna leve reacción. Por este motivo, no es un método concluyente.

Prueba de imantación

El oro no es un metal magnético, por lo tanto, una prueba sencilla consiste en acercar un imán potente a tu cadena. Si la joya es atraída fuertemente por el imán, es una señal clara de que no es oro macizo sino probablemente otro tipo de metal bañado en oro.

Esta prueba de imantación ayuda a descartar algunas falsificaciones, verificando su autenticidad.

Tené en cuenta que el cierre de la cadena a veces puede contener acero y ser ligeramente magnético, incluso si el resto de la cadena es de oro. Además, existen metales no magnéticos que tampoco son oro.

Otros métodos

Existen otras pruebas caseras, aunque también tienen ciertas limitaciones:

Prueba de la cerámica

Este examen ocular consiste en frotar suavemente la cadena sobre una pieza de cerámica sin esmaltar (como el reverso de un azulejo). El oro auténtico debería dejar una marca dorada o amarilla. Si deja una marca negra o gris, probablemente no sea oro.

Prueba de la piel

Algunas personas notan que las joyas falsas, al contacto prolongado con la piel y el sudor, pueden dejar una mancha verdosa o negruzca. El oro puro no suele causar esta reacción, aunque algunas aleaciones de oro de bajo quilataje mezcladas con otros metales sí podrían provocarla en personas sensibles.

En Stark Joyas podemos ayudarte con tu cadena de oro

Si bien los métodos caseros pueden ofrecer una orientación inicial, la única forma de tener certeza sobre la autenticidad y el quilataje de tu cadena de oro es a través de la evaluación de un profesional.

En Stark Joyas, los expertos cuentan con herramientas adecuadas para realizar pruebas precisas sin dañar tu pieza. Podemos verificar la composición exacta de tu cadena, confirmar su valor y ofrecerte la tranquilidad que buscas.

¡Visitanos y dejá que nuestros expertos te asesoren!

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